marzo 27, 2008

Pasantías: proyección y beneficios

Share on:

Cómo obtener una pasantía, pero también saber por qué se quiere seguir un programa de este tipo son preguntas que debe hacerse todo estudiante y que toca a las universidades o las instituciones especializadas en la materia responder correctamente, según opina Lisa Stephenson responsable de programas y actividades especializadas en desarrollo profesional en George Washington University.

Con la experiencia que le da su trabajo con 6,000 estudiantes, Stephenson disertó este miércoles 26 de marzo en la Conferencia Anual del programa de pasantías InteRDom, una iniciativa de la Fundación Global Democracia y Desarrollo (FUNGLODE) y Global Foundation for Democracy and Development (GFDD), en la que participaron alrededor de 150 instituciones nacionales e internacionales con sede en la República Dominicana.

La conferencia, un encuentro anual que promueve debates sobre las tendencias globales de gestión, capacitación y desarrollo en el área de recursos humanos, tuvo lugar en el auditorio de FUNGLODE, en Santo Domingo.

Al advertir que “no todos los estudiantes comprenden el valor de una pasantía”, la formadora estadounidense enfatizó que tanto las organizaciones como las universidades deben asegurarse de que el estudiante comprende su proyección y beneficios.

“Antes de aceptar una pasantía, el estudiante debe preguntarse si la experiencia será realmente beneficiosa, si le ofrecerá la oportunidad de presentar algún proyecto tangible o si al final obtendrá algún reconocimiento”, afirmó.

Y añadió que cuando se trata de pasantías, el estudiante espera que se les asigne trabajo real. Por ello sostuvo que es necesario ser honestos con él.

También llevó sus consejos a los potenciales empleadores de los pasantes: “Si parte del trabajo incluye cerrar sobres, dígaselo desde el principio, porque si le dice que estará haciendo un trabajo de investigación, pero pasa una gran parte del tiempo con los sobres, se sentirá decepcionado. Ofrézcale retroalimentación sobre su desempeño y oportunidades para rehacer el trabajo si quedó mal. Hágale parte de las reuniones de trabajo con los demás colegas”.

También recomendó a los contratadotes que cuando asignen un trabajo se tomen el tiempo de explicarle detalladamente el procedimiento, porque “aunque parezca trivial la tarea, no es obvio para alguien que no lo ha efectuado anteriormente”.

Antes de contratarle, insistió, “asegúrese de que tendrá un espacio de trabajo equipado y, dentro de lo posible, gestione alguna ayuda o pago para su correcto desempeño”.
La experta explicó que en el Centro de Desarrollo Profesional de la Elliot School of International Affairs, donde ofrece sus servicios, se solicita a los estudiantes que redacten un Plan de Acción de Desarrollo Profesional (conocido como PDAP por sus siglas en inglés), en el que intentan describir cómo sacarle más partido a la experiencia mientras asisten a la universidad y cómo mercadear sus calificaciones para desarrollar capacidades profesionales.
El PDAP -apuntó- representa una oportunidad para que nuestro centro ayude a los estudiantes a concretizar las metas propuestas.

Stephenson puntualizó que los estudiantes necesitan asistencia incluso para aprender a presentar sus currículum. Las cartas de presentación – abundó al respecto- deben ser adaptadas a la posición a la que los estudiantes aplican, y las universidades deben revisar y criticar estos documentos y ofrecer una constructiva retroalimentación a los estudiantes.”

Indicó que en la Elliot School of Internacional Affairs se ofrecen talleres durante todo el año para ayudar con la redacción de estos documentos y mejorar las habilidades ante entrevistas profesionales.

Haga click aquí para ver presentación completa en Power Point.